por Heraclio ASTUDILLO-POMBO. Universitat de Lleida
Introducción
Como se dijo en la entrada anterior, dedicada a introducir el tema de la loterofilia española de temática paleontológica, publicada el pasado 25 de enero, aunque se ha buscado y rebuscado mucho, no se ha podido encontrar más que un único boleto impreso para un sorteo de la Lotería Nacional de España. Al parecer los temas del patrimonio paleontológico español y de la investigación paleontológica en España, no le deben haber parecido dignos de reseñar a los responsables de la Comisión de Sorteos del Organismo de la Lotería Nacional. Pues los boletos de lotería también pueden ser un instrumento útil para difundir, entre la población del país, aspectos de la cultura científica nacional como medio para mejorar su educación y su autoestima. Se podría dar a conocer la existencia en el territorio nacional de algunos lugares con yacimientos paleontológicos de elevado interés científico y de importancia nacional o internacional o para divulgar el gran valor científico y patrimonial que tienen unos determinados restos paleobiológicos, descubiertos en alguna localidad remota, correspondientes a un cierto tipo de organismos del registro fósil regional o continental. Tampoco parece interesar a la mencionada comisión de lotería honrar la memoria de paleontólogos eminentes, del pasado o del presente histórico, que con su trabajo e inspiración, han contribuido a revelar y divulgar el pasado paleogeográfico y paleobiológico de este país, dentro y fuera de nuestras fronteras y dado a conocer su valor cultural.
Solamente los responsables de la Comisión de Sorteos de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE), han demostrado un cierto interés por el ámbito de la Paleontología, dedicando alguno de sus cupones y sorteos a difundir lugares españoles de interés paleontológico o a divulgar elemento del registro fósil español, de elevado interés científico, esperamos y deseamos que en el futuro dediquen algo de atención a la memoria de los padres fundadores de la paleontología española y a los paleontólogos posteriores.
Por todo lo anteriormente dicho, en esta entrada se presentará el único ejemplo de boleto de la Lotería Nacional dedicado a la temática paleontológica, hallado hasta la fecha, y en todas las entradas de futura publicación, dedicadas a tratar sobre el tema de la loterofilia paleontológica española, se presentarán ejemplares de cupones de la ONCE, directamente o indirectamente, relacionados con la Paleontología española.
Segundo cupón de la ONCE dedicado a Atapuerca en 2013
Si el primer cupón que la ONCE dedicó a Atapuerca se imprimió y distribuyó en el año 2001, para que se volviera a dedicar un segundo cupón a este importantísimo yacimiento paleoantropológico español, mundialmente famoso, tuvieron que pasar años, nada más y nada menos que 12 años. Puesto que el segundo cupón de la ONCE dedicado a Atapuerca se imprimió y se distribuyó para el sorteo del 6 de mayo de 2013.
El nombre y una imagen del famoso yacimiento burgalés de Atapuerca aparecieron en cinco millones de cupones de la ONCE. La emisión coincidía con la conmemoración del 40º aniversario de la Convención Internacional de la UNESCO, sobre la Protección del Patrimonio Cultural y Natural Mundial.
Introducción
Como se dijo en la entrada anterior, dedicada a introducir el tema de la loterofilia española de temática paleontológica, publicada el pasado 25 de enero, aunque se ha buscado y rebuscado mucho, no se ha podido encontrar más que un único boleto impreso para un sorteo de la Lotería Nacional de España. Al parecer los temas del patrimonio paleontológico español y de la investigación paleontológica en España, no le deben haber parecido dignos de reseñar a los responsables de la Comisión de Sorteos del Organismo de la Lotería Nacional. Pues los boletos de lotería también pueden ser un instrumento útil para difundir, entre la población del país, aspectos de la cultura científica nacional como medio para mejorar su educación y su autoestima. Se podría dar a conocer la existencia en el territorio nacional de algunos lugares con yacimientos paleontológicos de elevado interés científico y de importancia nacional o internacional o para divulgar el gran valor científico y patrimonial que tienen unos determinados restos paleobiológicos, descubiertos en alguna localidad remota, correspondientes a un cierto tipo de organismos del registro fósil regional o continental. Tampoco parece interesar a la mencionada comisión de lotería honrar la memoria de paleontólogos eminentes, del pasado o del presente histórico, que con su trabajo e inspiración, han contribuido a revelar y divulgar el pasado paleogeográfico y paleobiológico de este país, dentro y fuera de nuestras fronteras y dado a conocer su valor cultural.
Solamente los responsables de la Comisión de Sorteos de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE), han demostrado un cierto interés por el ámbito de la Paleontología, dedicando alguno de sus cupones y sorteos a difundir lugares españoles de interés paleontológico o a divulgar elemento del registro fósil español, de elevado interés científico, esperamos y deseamos que en el futuro dediquen algo de atención a la memoria de los padres fundadores de la paleontología española y a los paleontólogos posteriores.
Por todo lo anteriormente dicho, en esta entrada se presentará el único ejemplo de boleto de la Lotería Nacional dedicado a la temática paleontológica, hallado hasta la fecha, y en todas las entradas de futura publicación, dedicadas a tratar sobre el tema de la loterofilia paleontológica española, se presentarán ejemplares de cupones de la ONCE, directamente o indirectamente, relacionados con la Paleontología española.
Segundo cupón de la ONCE dedicado a Atapuerca en 2013
Si el primer cupón que la ONCE dedicó a Atapuerca se imprimió y distribuyó en el año 2001, para que se volviera a dedicar un segundo cupón a este importantísimo yacimiento paleoantropológico español, mundialmente famoso, tuvieron que pasar años, nada más y nada menos que 12 años. Puesto que el segundo cupón de la ONCE dedicado a Atapuerca se imprimió y se distribuyó para el sorteo del 6 de mayo de 2013.
El nombre y una imagen del famoso yacimiento burgalés de Atapuerca aparecieron en cinco millones de cupones de la ONCE. La emisión coincidía con la conmemoración del 40º aniversario de la Convención Internacional de la UNESCO, sobre la Protección del Patrimonio Cultural y Natural Mundial.
Aspecto del prototipo del cupón de la ONCE correspondiente al sorteo del 6 de mayo de 2013, como prueba de impresión. Dedicado a la divulgación de la Cuenca arqueológica de Atapuerca, en Burgos. Nótese que faltan todos aquellos elementos que le darían validez en un sorteo, como son el código de barras, el número de la serie y el número del cupón
Imagen:El Correo de Burgos
Este cupón pertenecía a la serie que la ONCE estaba dedicando en aquella época a divulgar todos aquellos monumentos y lugares españoles que habían sido declarados Patrimonio Mundial de la UNESCO. Esta serie de cupones, que comenzó en noviembre de 2012 y estaba previsto que finalizase a mediados de 2013, reuniendo todos los lugares y monumentos del Estado español que están inscritos en esta Convención de la UNESCO.
Cupones de la ONCE dedicados a las pinturas rupestres de la cueva de Altamira, en Santillana del Mar (Cantabria)
Este es un tema al que, de momento y según los resultados obtenidos en nuestras pesquisas en Internet, salvo error u omisión, parecen haberse dedicado solamente tres cupones del "sorteo de los ciegos" durante los últimos 20 años, o más concretamente, entre el año 2000 y el 2012.
El tema de la pintura rupestres prehistóricas lo hemos relacionado con el tema de la paleontología, a través de las diferentes especies animales, hoy extintas en todo el mundo moderno, que fueron representadas artisticamente hace miles de años. La extinción de esta fauna prehistórica se produjo, en muchos casos, por el efecto combinado del cambio climático y de la depredación humana y que fueron representadas en forma de pinturas y grabados rupestres, en los techos y muros de esa cavidad cántabra.
Aunque las pinturas más conocidas de la cueva de Altamira, por parte del gran público, son las realizadas en el techo de la llamada sala de los polícromos o Capilla Sixtina prehistórica, existen pinturas y grabados de animales repartidas por las paredes y techos de otras partes de la cueva.
Mapa esquemático de la cueva de Altamira, indicando la situación aproximada de las diferentes figuras de animales prehistóricos, distribuidas a lo largo de las galerías. Se trata de una serie de hermosas representaciones gráficas de diferentes especies de la fauna pleistocena, realizadas, hace más de 13000 años y menos de 34000, con alguna finalidad de tipo mágico o comunicativo, que hoy nos resulta desconocida. Photo: E. Pfeiffer 'The Creative Explosion'
Imagen: Plan of the caveat Altamira.
Están pintados o grabados animales de la fauna salvaje europea, característica de finales del Pleistoceno y principios del Holoceno. Se trata de animales que formaron parte de la fauna europea hacia finales del último periodo glacial, hace 13000 años.
Las especies animales que han sido identificadas en las representaciones figurativas son las siguientes: : bisontes esteparios, caballos salvajes, ciervos, muflones, jabalís y mammuts, todos ellos eran animales que habitaron en otras zonas de Europa de clima frío.
El estilo de gran parte de las representaciones de Altamira se enmarca en la denominada «escuela franco-cantábrica», caracterizada por el realismo de las figuras representadas. Contiene pinturas polícromas, grabados, pinturas negras, rojas y ocres que representan mayoritariamente animales, algunas figuras antropomorfas, y algunos dibujos abstractos y símbolos no figurativos
Asociación de animales en el gran panel de la Cueva de Altamira, segregados según el paradigma de Leroi-Gourhan. Según el cual las cuevas pintadas serían templos, un espacio público que contenían algunos santuarios, espacio reservados solo para el uso de ciertas personas y representación de determinadas divinidades. Leroi-Gourhan el animal principal es el bisonte (representación de la mujer), con algunos caballos como complementarios (representación del hombre); siendo acompañados de ciertos animales periféricos, en este caso jabalíes y ciervos. El hombre prehistórico no plasmaba una colección de animales comestibles o de presas habituales, más bien sería un bestiario mítico, como muestra la discrepancia entre aquello representado gráficamente y los restos alimenticios encontrados en las excavaciones
Imagen:Wikipedia
Las pinturas y grabados de la cueva pertenecen a los períodos prehistóricos denominados Magdaleniense y Solutrense principalmente y, algunos otros, al Gravetiense y al comienzo del Auriñaciense, esto último según pruebas utilizando series de uranio. De esta forma se puede asegurar que la cueva fue utilizada durante varios periodos, sumando 22 000 años de ocupación, desde hace unos 35 600 hasta hace 13 000 años, cuando la entrada principal de la cueva quedó sellada por un derrumbe, todos ello sucedió dentro del Paleolítico superior.
Este cupón pertenecía a la serie que la ONCE estaba dedicando en aquella época a divulgar todos aquellos monumentos y lugares españoles que habían sido declarados Patrimonio Mundial de la UNESCO. Esta serie de cupones, que comenzó en noviembre de 2012 y estaba previsto que finalizase a mediados de 2013, reuniendo todos los lugares y monumentos del Estado español que están inscritos en esta Convención de la UNESCO.
La Cuenca arqueológica de Atapuerca fue inscrita en la Lista de Patrimonio Mundial
en el año 2000, por ser allí donde se encontró la evidencia más temprana y abundante
del ser humano en Europa. Además, los restos paleoantropológicos que aún permanecen en la sierra de Atapuerca constituyen una reserva de información excepcional sobre la naturaleza física y el modo de vida de las comunidades humanas europeas más tempranas.
Los yacimientos de Atapuerca constituyen un testimonio excepcional para conocer la historia de la evolución humana proporcionando unos restos, que son únicos, de los más remotos
pobladores de Europa. Estos yacimientos se conocen desde finales del siglo XIX,
cuando se realizaron las primeras exploraciones sistemáticas del sistema kárstico Cueva
Mayor.
Este es un tema al que, de momento y según los resultados obtenidos en nuestras pesquisas en Internet, salvo error u omisión, parecen haberse dedicado solamente tres cupones del "sorteo de los ciegos" durante los últimos 20 años, o más concretamente, entre el año 2000 y el 2012.
El tema de la pintura rupestres prehistóricas lo hemos relacionado con el tema de la paleontología, a través de las diferentes especies animales, hoy extintas en todo el mundo moderno, que fueron representadas artisticamente hace miles de años. La extinción de esta fauna prehistórica se produjo, en muchos casos, por el efecto combinado del cambio climático y de la depredación humana y que fueron representadas en forma de pinturas y grabados rupestres, en los techos y muros de esa cavidad cántabra.
Aunque las pinturas más conocidas de la cueva de Altamira, por parte del gran público, son las realizadas en el techo de la llamada sala de los polícromos o Capilla Sixtina prehistórica, existen pinturas y grabados de animales repartidas por las paredes y techos de otras partes de la cueva.
Mapa esquemático de la cueva de Altamira, indicando la situación aproximada de las diferentes figuras de animales prehistóricos, distribuidas a lo largo de las galerías. Se trata de una serie de hermosas representaciones gráficas de diferentes especies de la fauna pleistocena, realizadas, hace más de 13000 años y menos de 34000, con alguna finalidad de tipo mágico o comunicativo, que hoy nos resulta desconocida. Photo: E. Pfeiffer 'The Creative Explosion'
Imagen: Plan of the caveat Altamira.
Están pintados o grabados animales de la fauna salvaje europea, característica de finales del Pleistoceno y principios del Holoceno. Se trata de animales que formaron parte de la fauna europea hacia finales del último periodo glacial, hace 13000 años.
Las especies animales que han sido identificadas en las representaciones figurativas son las siguientes: : bisontes esteparios, caballos salvajes, ciervos, muflones, jabalís y mammuts, todos ellos eran animales que habitaron en otras zonas de Europa de clima frío.
El estilo de gran parte de las representaciones de Altamira se enmarca en la denominada «escuela franco-cantábrica», caracterizada por el realismo de las figuras representadas. Contiene pinturas polícromas, grabados, pinturas negras, rojas y ocres que representan mayoritariamente animales, algunas figuras antropomorfas, y algunos dibujos abstractos y símbolos no figurativos
Asociación de animales en el gran panel de la Cueva de Altamira, segregados según el paradigma de Leroi-Gourhan. Según el cual las cuevas pintadas serían templos, un espacio público que contenían algunos santuarios, espacio reservados solo para el uso de ciertas personas y representación de determinadas divinidades. Leroi-Gourhan el animal principal es el bisonte (representación de la mujer), con algunos caballos como complementarios (representación del hombre); siendo acompañados de ciertos animales periféricos, en este caso jabalíes y ciervos. El hombre prehistórico no plasmaba una colección de animales comestibles o de presas habituales, más bien sería un bestiario mítico, como muestra la discrepancia entre aquello representado gráficamente y los restos alimenticios encontrados en las excavaciones
Imagen:Wikipedia
Las pinturas y grabados de la cueva pertenecen a los períodos prehistóricos denominados Magdaleniense y Solutrense principalmente y, algunos otros, al Gravetiense y al comienzo del Auriñaciense, esto último según pruebas utilizando series de uranio. De esta forma se puede asegurar que la cueva fue utilizada durante varios periodos, sumando 22 000 años de ocupación, desde hace unos 35 600 hasta hace 13 000 años, cuando la entrada principal de la cueva quedó sellada por un derrumbe, todos ello sucedió dentro del Paleolítico superior.
Cupón de la ONCE del sorteo del 7 de agosto del 2000
Este fue el primer cupón dedicado por la ONCE al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira.
También fue el primer cupón de la ONCE que se puede vincular, indirectamente, con la paleontología, por medio de sus diversas representaciones paleontológicas, en forma de pinturas y grabados rupestres que reflejaban la fauna de aquella época lejana, durante el Paleolítico.
Cuevas de Altamira. Cantabria. Patrimonio de la Humanidad.
Imagen: Todo Colección
Boleto o décimo de lotería del sorteo del 26 de mayo de 2001
Este fue el primer cupón dedicado por la ONCE al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira.
También fue el primer cupón de la ONCE que se puede vincular, indirectamente, con la paleontología, por medio de sus diversas representaciones paleontológicas, en forma de pinturas y grabados rupestres que reflejaban la fauna de aquella época lejana, durante el Paleolítico.
Cuevas de Altamira. Cantabria. Patrimonio de la Humanidad.
Imagen: Todo Colección
Boleto o décimo de lotería del sorteo del 26 de mayo de 2001
Al parecer, este ha sido el único boleto o décimo impreso para un sorteo de la Lotería Nacional de España que, como en el caso anterior, se puede vincular, indirectamente, con la paleontología, por medio de una representación paleontológica, en forma de pintura rupestre. En este caso se trata de una representación de un ejemplar adulto de bisonte de estepa (Bison priscus).
"Museo de Altamira" La Neocueva: Bisonte del Paleolítico (14000 años) Foto: P. Saura / Museo de Altamira
Imagen:Lotería Nacional2001Cupón de la ONCE del sorteo del 2 de septiembre del 2007
Este fue el segundo cupón dedicado por la ONCE al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira, en el término municipal de Santillana del Marp. En este caso, con motivo de la celebración del 28º aniversario de la fundación de su museo arqueológico. Como en el caso anterior se ha representado a su animal emblemático, el bisonte de estepa (Bison priscus).
Museos de España. Museo de Altamira fundado en 1979. Santillana del Mar. Cantabria
Imagen:Todo Colección
Cupón de la ONCE del sorteo del 28 de noviembre del 2012
Este fue el tercer y, de momento, último cupón de los que la ONCE ha dedicado al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira, Como en el caso anterior, otra vez se ha vuelto a representar a su animal emblemático, el bisonte de estepa (Bison priscus).
Cueva de Altamira y Arte Rupestre Paleolítico de la Cornisa Cantábrica. Cantabria, País Vasco y Asturias
Imagen: Todo Colección
Fuentes:
- Anónimo. Cueva de Altamira. Wikipedia
- Anónimo (2012). La ONCE dedica el cupón de mañana a la Cueva de Altamira y el Arte Rupestre Paleolítico de la Cornisa Cantábrica. Europa Press 27/11/2012
- Bisbal, Guillermo (2018). Los animales representados en la cueva de Altamira. Mis animales 22/10/2018
- Europa Press (2013). Atapuerca en cinco millones de cupones de la ONCE. El Correo de Burgos
Este fue el segundo cupón dedicado por la ONCE al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira, en el término municipal de Santillana del Marp. En este caso, con motivo de la celebración del 28º aniversario de la fundación de su museo arqueológico. Como en el caso anterior se ha representado a su animal emblemático, el bisonte de estepa (Bison priscus).
Museos de España. Museo de Altamira fundado en 1979. Santillana del Mar. Cantabria
Imagen:Todo Colección
Cupón de la ONCE del sorteo del 28 de noviembre del 2012
Este fue el tercer y, de momento, último cupón de los que la ONCE ha dedicado al sitio arqueológico de las cuevas de Altamira, Como en el caso anterior, otra vez se ha vuelto a representar a su animal emblemático, el bisonte de estepa (Bison priscus).
Cueva de Altamira y Arte Rupestre Paleolítico de la Cornisa Cantábrica. Cantabria, País Vasco y Asturias
Imagen: Todo Colección
Fuentes:
- Anónimo. Cueva de Altamira. Wikipedia
- Anónimo (2012). La ONCE dedica el cupón de mañana a la Cueva de Altamira y el Arte Rupestre Paleolítico de la Cornisa Cantábrica. Europa Press 27/11/2012
- Bisbal, Guillermo (2018). Los animales representados en la cueva de Altamira. Mis animales 22/10/2018
- Europa Press (2013). Atapuerca en cinco millones de cupones de la ONCE. El Correo de Burgos